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Los avances en la tecnología y los dispositivos de realidad aumentada y virtual han permitido recrear a escala la sociedad física actual.  Y es que, parece que el Metaverso ha llegado para quedarse. Si bien es cierto que el lanzamiento final de esta sociedad virtual paralela todavía está en desarrollo, las empresas no han tardado en interesarse e invertir en los actuales avances del Metaverso.

Empresas como Descentraland, ya han creado metaversos funcionales y operativos donde los usuarios pueden comprar en un mundo virtual parcelas de terreno donde construir, diseñar y monetizar. Tal como explica Diario Bitcoin, la mayor diferencia entre Decentraland y las plataformas de realidad virtual existentes es la propiedad: Los usuarios son los dueños de Decentraland en lugar de ser una empresa o corporación.

La Metaverse Fashion Week

París, Milán, Nova York y Descentraland son ahora ejemplos de lugares donde se celebran los desfiles de alta costura más famosos del mundo. Del 24 al 27 de marzo del presente año tuvo lugar el Metaverse Fashion Week, una semana llena de desfiles, after-parties, experiencias inmersivas, compras, mesas redondas y mucha más actividades. Entre las marcas que participaron se encuentran Elie Saab, Etro, Tommy Hilfiger, Dundas, Garrett Leight, Roberto Cavalli, Paco Rabanne, Hugo, Faith Connexion o Dolce & Gabbana.

A diferencia de muchas semanas de la moda tradicionales que se han celebrado hasta la fecha y donde únicamente se puede asistir con una invitación, el Metaverse Fashion Week fue gratuito y abierto a todos los públicos.

Los usuarios simplemente iniciaban sesión en la plataforma de Decentraland y asistieron mediante sus avatares digitales a los eventos programados. Durante el desfile de moda,  los usuarios pudieron escanear un código QR para ver una representación de la prenda, antes de usar fondos de su cartera criptográfica -en este caso Ethereums– para comprar los artículos en forma de tokens no fungibles o NFTs.

La semana de la moda virtual: implicaciones legales

El inicio de esta semana de la moda virtual no solo fue una oportunidad para los usuarios y empresas que se sumergieron en el Metaverso, sino que plantea una serie de interrogantes sin resolver en el mundo legal. Más concretamente, el área de propiedad intelectual e industrial se ve amenazada por el posible uso y réplica de los diseños, patentes y marcas registrados en el mundo físico.

Ejemplo de ello es el reciente “Caso Hermès donde la famosa marca de alta costura francesa demandó al artista digital Mason Rothschild por infringir sus derechos de marca registrada al haber creado los Metabirkins, unos NFTs inspirados en uno de los bolsos más conocidos de Hermès, el Birkin.

Esta demanda pone de manifiesto la falta de regulación de los derechos de protección de las marcas en el mundo virtual. Y es que, todavía no se conoce ningún proyecto regulatorio que defina cómo salvaguardar los derechos de los titulares de tales creaciones artísticas en el Metaverso. Por el momento, las empresas de alta costura se ciñen a la aplicación analógica de la regulación vigente en materia de propiedad intelectual e industrial del mundo tangible, sin conocer con exactitud los interrogantes legales que pueden surgir en el mundo virtual.